lunes, 11 de noviembre de 2013

Ay que sí, de verdad!! qué cansada estoy de hablar sobre relaciones abiertas y oir hablar de los celos, celos, celos, celosCELOScElOsCELOSceLosCeloSCELOScelosCELOSCELOScelosceloscelosceloscelosssssssss, que de tanto decirlo pierde el sentido!
Que sí. Que son las primeras emociones que aparecen. Que hay que currarselos. Que hay que aprender a gestionarlos. QUE SÍIIIIIIII. Pero ni de lejos me parecen la piedra filosofal de las relaciones! Vamos a ver: en una relación en la que no hay celos (porque sea cerrada, porque esto esté muy cuidado, porque no haya nadie en los alrededores! qué sé yo, imaginemos que no hay por un momento), ¿ya hay una relación asertiva? ¿más o menos simétrica? ¿donde lxs integrantes se sientan presentes y tenidxs en cuenta, y reflejadxs sus sentires y deseares en el espacio común de una manera más o menos simétrica? NO. ¿Y realmente es tan increíblemente sobrehumano aprender a gestionar los propios celos?...¿y nos parece más fácil aprender a gestionar nuestras relaciones de una forma más asertiva y simétrica?

NOOOOOOOOOOO.

HABLEMOS DE MIEDOS. Inseguridades. Dependencias. LEÑE.

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