domingo, 1 de mayo de 2016

Ejercicios de resonancia y reacción: Heterotopías y revelaciones.

*En una cala perdida en Bolnuevo, Mazarrón, Murcia


[Leyendo Utopías y Heterotopías 
(hasta la tercera hoja, que dejó de parecer un cuento y me aburrí)
 Des espaces autres, Michael Foucault (1967)

y el poemario Husos. Notas al margen. de Chantal Maillard (2006),
en su antología En un princípio era el hambre (2015)]





El intersticio de sus palabras
ternuras de planeta concebidas en el intersticio de sus palabras.

                planeta
                constelación
                importancia
                   
                        ¿Qué hace un planeta
                              cuando no lo miras?

      La espesura de sus relatos
           la dulzura de las utopías.



No vivimos en un espacio neutro y blanco.
Heterotopías
esas impugnaciones míticas y reales del espacio en el que vivimos.
"...es sobre esa gran cama que una descubre el océano".*

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Me interesan los mundos oníricos. Me interesan los mitos, los rituales. 
                        Me interesa la memoria.
                              ¿la memoria es un ritual?

Dice Chantal: Sobrevivir. Trazando marcos, templos: delimitando. Haciendo templos. No para el orden, no para el augurio sino para contemplar. Templos: cuadraturas del cielo, para la protección. [...] Soy de viaje. Trazo templos. Con-templo. Plazos en el espacio, recortes. Plazos para la mirada. Para que more la mirada. Para que se de-more. Para (sobre)vivir.** 

                                Escribir es un ritual que hace templos.
                                Escribir es un templo.

                                Mi cuerpo es un templo. Soy de viaje. Plazos en el espacio, recortes. Mi 
                                cuerpo es un templo, en viaje, de marcos sobretrazados y así se mueven.
                                Dibujando. 
                                Límites. Los bordes de este cuerpo que se destrazan y se retrazan, se 
                                destrazan y se mueven, al moverse. Mi cuerpo lleno (hecho) de huellas. 


[...] No es renuncia (¿quién iba a renunciar sino el propio "mí"?) sino la observación de su permanente deambular entre los husos, de huso en huso.***

Toda revelación ha de merecerse. Merecer: no se trata de merced concedida ni tampoco de gracia divina. Merecer es haber hecho hueco.

El sufrimiento abre hueco. El sufrimiento es la voluntad del "mí" (voluntad-deseo) anegada. Por eso hace hueco. Libera el espacio donde la revelación adviene. Donde puede advenir, siempre. Siempre que haya desocupación. 








* recortes del original
** paréntesis míos
*** frase recortada, en el original no es así literal.


[Altos en el camino, tropiezos, nodos donde los procesos se atascan, se demoran, se elaboran. Procesos y revelaciones.]


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